A veces pienso que el fallido soy yo. No puede ser que sea la única persona en el mundo, o al menos en mi mundo, a quien le pasa esto.
Hoy, Septiembre de 2024, tengo 44 años. Y he pasado los últimos… 20 años, buscando algo sin saber que.
Dicen por ahí que se trata de una búsqueda existencial. Que es mas que nada algo espiritual lo que uno busca. Es ese sentimiento de vacío que no se llena con nada, ni con mas mascotas, ni con mas dinero, ni siquiera con más cosas materiales.
Estoy llevando una vida de dichas, no me puedo quejar. Tengo un buen trabajo, un buen pasar económico, una linda familia, un techo y la comida no escasea. El 99% de las personas en este mundo se sienten felices de solo pensar que tienen la mitad de lo que yo tengo. Sin embargo, este sentimiento de vacío es tan profundo que es comparable con tirarse en paracaídas con un paracaídas que armaste vos por primera vez, sin saber hacerlo, solo viendo algunos videos de youtube.
En fin, este artículo no es para quejarme, ni mucho menos para dar lastima. Pero quería hacer esa introducción porque creo que lo que yo escribí arriba es, en muchisimos casos, un disparador para el cambio. Cuantas personas en este mundo llegan a sentirse como yo? Cuantas personas en el planeta estan sentadas frente a un tv sin saber que mirar, o frente a un navegador de internet consumiendo videos sobre inversiones en la bolsa o FBA?
La realidad es que la frase «Me siento vacío» es mucho más comun de lo que parece. Y es que hemos perdido el rumbo hace mucho tiempo. A como yo lo veo, en los proximos 10 o 15 años será más común ver zombies caminando por la calle con la mirada de «me siento vacío» que gente feliz de vivir la vida tal como la está pasando.
Y el problema es que vivimos en un mundo vertiginoso, que nos lleva por el borde del abismo hasta el punto de no retorno. Le llamo así al punto en el que ya no te queda vuelta atrás, solo te queda mirarte al espejo y tomar una decisión.
Las redes sociales, los medios de comunicación, el trabajo, la rutina diaria, el simple hecho de salir a trabajar, ir a la oficina en autobús, oliendo los miles de olores del resto de esos zombies, sin siquiera poder disfrutar de 5 minutos de rayos de luz sin preocuparte por alguna notificación que te llega al celular. Esta es la vida que estamos viviendo. Una vida llena de estimulos baratos y peligrosos, que solo te mantienen en un estado de «semi consciencia». Lo suficiente como para que puedas responder cuanto antes.
Y es aquí donde entro yo. En ese grupo de gente que se mira en el tren y piensa «que haces para ser feliz?»
Hay mucha tela para cortar. Mucho que analizar, mucho que pensar, mucho de que hablar. Te espero en este mismo sitio la proxima semana. Veremos quien tiene un mejor concepto sobre la felicidad y quien no entiende que significa y aún así, es feliz